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¿Beber líquidos durante las comidas? Puede estar alterando tu digestión

Beber gran cantidad de líquidos durante las comidas puede estar posiblemente tu digestión. No beber agua mientras comemos es definitivamente un gran hack para una digestión optima.


Cuando se ingieren alimentos, el sistema digestivo pone en marcha un conjunto de mecanismos coordinados para descomponer los nutrientes en componentes más simples y absorbibles. Las enzimas digestivas, producidas principalmente por el estómago y el páncreas, desempeñan un papel esencial en la descomposición de carbohidratos, proteínas y grasas. Estas enzimas operan en rangos específicos de pH y concentración de enzimas para optimizar su actividad.



La ingestión de agua en grandes cantidades durante las comidas puede diluir los jugos gástricos y enzimas digestivas presentes en el estómago, alterando potencialmente el equilibrio óptimo requerido para la digestión eficiente. La concentración reducida de enzimas y ácido gástrico podría ralentizar la descomposición de los alimentos en sus componentes básicos, dificultando la absorción adecuada de nutrientes en el intestino delgado.


Asimismo, existe la posibilidad de que la presencia de líquidos en el estómago dilate su capacidad, afectando la señalización de saciedad y el proceso de motilidad que empuja los alimentos hacia el intestino delgado. Esto podría llevar a una sensación de plenitud prematura y, en última instancia, influir en los patrones de alimentación y la absorción de nutrientes.




Entonces: ¿Cuándo tomar agua?


Logicamente no te olvides de hidratarte lo suficiente a lo largo del día. Preocupate de ingerir líquidos 15 minutos antes mínimo antes de cualquier comida y luego de cualquier comida lo mejor sería comenzar a ingerir líquidos a partir de 1 hora de haber realizado tu ultima ingesta.


Es importante resaltar que la recomendación de abstenerse de beber agua durante las comidas varía en función de la tolerancia individual y las necesidades de hidratación. En algunos casos, consumir pequeñas cantidades de agua durante las comidas puede no tener un impacto significativo en la digestión.


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